La Acupuntura

Aparte de insertar las agujas de acupuntura y rotarlas para tonificar o dispersar, los acupuntores también utilizan las moxas. La técnica más extendida es un puro o cono de artemisa que se enciende para calentar el punto o bien se corta un trozo y se coloca en el mango de la aguja, dejando que se consuma totalmente. Los acupuntores utilizan ampliamente esta técnica para el tratamiento del dolor.

El 16 de noviembre de 2010, la Unesco declaró la acupuntura y la moxibustión chinas como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Existe debate por su carácter de proclamarse medicina alternativa a la occidental y porque sectores científicos la describen sólo como un placebo, en los últimos años se ha intentado demostrar su base científica y la capacidad que posee de influir positivamente tanto en el alivio del dolor como en las funciones sensitivas, motoras y autónomas. Aunque la Organización Mundial de la Salud aprueba su uso para tratar ciertas dolencias 3 muchos científicos han calificado este aval como excesivamente crédulo y critican la falta de objeciones a los trabajos usados para apoyar este aval.

Algunas universidades de distintos países la han incorporado a sus planes de estudios u ofrecen cursos de especialización y posgrados para médicos u otros profesionales.